La tuneladora más grande del mundo: Bertha

En el artículo de hoy vamos a ver cuál es la tuneladora más grande del mundo. Y la tuneladora más grande no es otra que Bertha, fabricada por ACS para Seattle. Un bicharraco capaz de levantar juntos dos Boeing 747. Una bestialidad.

Y es que, no nos vamos a engañar, pocas cosas hay más satisfactorias para un hombre que ver un pedazo de máquina haciendo su trabajo. Ese movimiento de engranajes y sistemas que representa el ingenio humano en su máximo esplendor. ¿Y hay alguna máquina más impresionante que una tuneladora?

¿Qué es una tuneladora?

Una tuneladora (también conocida como Tunnel Boring Machine) es una máquina de colosales proporciones (a menudo, más de 6000 toneladas de peso y 150 metros de longitud) que se utiliza para hacer túneles bajo tierra en casi cualquier tipo de roca o suelo. Normalmente, con el objetivo de crear una nueva vía de circulación para vehículos.

¿Cuál es la tuneladora más grande del mundo? Bertha

La tuneladora más grande que hay en la actualidad es Bertha, fabricada en 2013 por la empresa española ACS (la de Florentino Pérez) para Seattle.

Bertha, la tuneladora más grande del mundo
Berta, la tuneladora más grande del mundo

Bertha tiene un diámetro de 17,48 metros (el equivalente a un edificio de seis plantas, nada más y nada menos). También tiene una longitud de 112 metros (es más larga que un campo de fútbol) y un peso de más de 7000 toneladas (equivalente a 450 autobuses).

El nombre de Bertha es en honor a la primera alcaldesa de Seattle (y de todo EEUU), Bertha Knight (quizá por haberle puesto su nombre a una tuneladora de semejantes dimensiones se esté preguntando desde el más allá si no la estarán llamando gorda, no lo sabemos).

Bertha Knight, primera alcaldesa de EEUU
Berta Knight, primera alcaldesa de EEUU (en Seattle)

Esta tuneladora se utilizó para sustituir un tramo de viaducto en la famosa ruta canadiense 99, que se había dañado en el terremoto Nisqually del 2001. Este túnel de 3,2 km debería haberse completado en 14 meses, pero, como suele suceder con este tipo de proyectos, la obra se alargó bastante más (no se finalizó hasta 2017).

Bertha fue diseñada por Dragados (una empresa perteneciente a ACS) y la fabricaron en Japón por Hitachi Zosen, en Sakai (Osaka). Y, para su desarrollo, ha hecho falta la colaboración de más de 300 personas en los procesos de diseño y construcción.

La potencia instalada que tiene Bertha también es impresionante: Suficiente para dar suministro completo a una ciudad de 40.000 habitantes. Lógicamente, para mover semejante bicho, necesitas una potencia descomunal.

Cuando se terminó de construir, se transportó desde Japón hasta Seattle en barco. Obviamente, para el transporte hubo que desmontarla, transportándola a piezas de 900 toneladas de peso cada una.

El túnel resultante fue también un buen bicharraco ingenieril: 17,5 metros de diámetro, 2,8 kilómetros de longitud, dos calzadas superpuestas, cada una de ellas con dos carriles por cada sentido. Además de los pasillos de evacuación, mantenimiento y sistemas de ventilación.

En fin, un gran ejemplo del ingenio humano en su máxima expresión.

Y, ahora, vamos a echar un vistazo a este prodigio de la ingeniería en funcionamiento. Aquí te dejamos una serie de vídeos donde puedes ver a Bertha en algunas de las tareas más comunes para las que están concebidos estos enormes aparatos:

Para terminar y como dato curioso, este gigantesco prodigio de la ingeniería tiene su propia cuenta de Twitter (https://twitter.com/BerthaDigsSR99).

¿Qué otras grandes tuneladoras hay?

Ahora, Bertha es la tuneladora más grande, pero no es la única tuneladora de grandes dimensiones. Vamos a hacer un rápido repaso por algunas otras tuneladoras que también son impresionantes.

Dulcinea y Tizona

Con semejantes nombres, no cabe duda de que estas dos tuneladoras son españolas. Fueron fabricadas por la alemana Herrenknecht, costaron unos 45 millones de euros cada una, se utilizaron en el soterramiento de la M30 y fueron, en su momento, las más grandes del mundo.

Tizona tuneladora gemela de Dulcinea
Tizona, la tuneladora gemela de Dulcinea

Medían ambas alrededor de 148 metros de largo, contaban con un peso de unas 4200 toneladas y tenían un diámetro de 15 metros.

Eran grandes bestias, pero ya no ostentan el título de tuneladoras más grandes.

Big Becky

Después de Bertha y las gemelas Dulcinea y Tizona, la siguiente tuneladora más grande es Big Becky. Se trata de una tuneladora canadiense con un diámetro de 14 metros y 4000 toneladas de peso.

Tuneladora Big Becky
Tuneladora Big Becky

Todo ello permite a Big Becky perforar 4 metros por hora, y fue diseñada para excavar un túnel de 10 kilómetros con el fin de desviar parte del río Niágara a una central hidroeléctrica.

Godot

Por último, tenemos Godot, la primera tuneladora de la compañía The Boring Company, de Elon Musk. Y, como todo lo que hace Elon Musk, no podemos olvidarnos de hacerle una mención.

La tuneladora más grande del mundo: Bertha
Tuneladora Godot de The Boring Company

No hay mucha información sobre esta máquina, pero, aparentemente, es capaz de acelerar el proceso de tunelación en hasta 14 veces. Si esto es cierto, supone un auténtico game-changer en el mundo de las infraestructuras.

¿Cuál es la importancia de las tuneladoras?

Las tuneladoras son, a día de hoy, máquinas imprescindibles en los trabajos de infraestructuras. Y es que, en no pocas ocasiones, las nuevas vías de circulación requieren atravesar montañas o, directamente, ir bajo suelo.

Y, a veces, estos trabajos se llevan a cabo muy cerca o incluso justo debajo de la ciudad (como en el caso del soterramiento de la M30 en Madrid). Obviamente, en estos casos hay que ir con sumo cuidado.

Generalmente, cambiar la trayectoria del túnel no es una posibilidad, por lo que se opta por reforzar los cimientos de las estructuras de los edificios. Pese a estos refuerzos, las tuneladoras deben garantizar el mínimo de vibración posible para evitar desgracias. Eso es algo que suma mayor sobrecoste y dificultad a la fabricación de las tuneladoras.

Piensa que, en ocasiones, la tuneladora pasa a apenas 4 metros de lugares críticos de los edificios. Es decir, aunque las máquinas sean unas monstruosidades, lo cierto es que es un trabajo de máxima precisión. De hecho, normalmente se lleva a cabo, simultáneamente, un trabajo de monitorización para evitar peligros.

En buena medida, la lentitud de las tuneladoras reside en lo que hay encima de ellas. Una tuneladora como Bertha puede tunelar 150 metros por semana, pero, obviamente, si la pones debajo de edificios, tiene que ir más lenta para evitar peligros.

No obstante, hay que decir que este no fue el caso de Bertha y el túnel de Seattle, puesto que, para evitar problemas, el túnel se llevó a cabo a 61 metros bajo tierra. Ningún problema a esos niveles de profundidad.

¿Cómo funciona una tuneladora?

Básicamente, lo que hace la tuneladora es dos trabajos al mismo tiempo: Por un lado, va excavando la tierra o la roca y, por otro, va reutilizando ese mismo material que está excavando para soportar la parte más delantera del túnel que está creando (de forma temporal, claro).

El material sobrante se extrae con un tornillo de Arquímedes y ya, una vez detrás de la tuneladora, se extrae fuera del túnel.

Una vez la tuneladora termina un pase de avance, la máquina se frena completamente y construye el anillo de la estructura del túnel. Es esta estructura la que mantiene firme el túnel y evita que se caiga. Lógicamente, es un trabajo que se debe ir haciendo al mismo tiempo que se excava.

Para esta estructura se utilizan piezas prefabricadas de hormigón armado (las conocidas como dovelas), las cuales se han fabricado a medida en una fábrica exterior, con una precisión realmente sorprendente que hace que encajen al milímetro.

Para la colocación de estas enormes piezas se utiliza un mecanismo llamado erector, que puede ser hidráulico o mecánico. El erector de la tuneladora va colocando las diferentes piezas de hormigón como si de un puzzle se tratase.

Para terminar, decir que estas tuneladoras trabajan las 24 horas del día y que sólo paran para las pertinentes labores de mantenimiento. Para mantener este enorme bicho funcionando, se recurre a equipos de decenas de personas trabajando en turnos de 12 horas para asegurar que todo funciona correctamente.

Sin duda, uno de los mayores ejemplos de colaboración de hombres para lograr algo espectacular.

Aquí te dejamos un vídeo de cómo funciona una tuneladora.

Máquinas de un único uso

Seguramente, teniendo en cuenta lo mucho que cuestan estas máquinas, pensarías que es lógico reutilizarlas en varios túneles. Sin embargo, piensa que cada túnel es de su padre y de su madre, así que no es posible la reutilización.

Lo que se hace una vez se termina el túnel, normalmente, es desmontar la tuneladora y fundir las piezas para reciclarlas (a excepción de los motores, piezas eléctricas, etc, que se suelen revender).

Sin embargo, hay veces en que la tuneladora es tan grande que ni siquiera compensa hacer esto. En muchos casos, se desmantelan y se dejan enterradas.

Curioso, ¿no? Años de trabajo para un único uso y hacerlas desaparecer. Es como un gran mandala ingenieril.

En definitiva, esperamos que este artículo sobre las mayores tuneladoras del mundo y cuál es su funcionamiento te haya resultado tan interesante como a nosotros nos ha resultado escribirlo.

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